Desde que Mathew Perry cerrara su etapa “Friends” junto con el resto de compañeros, la suerte no le ha acompañado. Al menos televisivamente. Tras varias películas de poco éxito, Perry estrenó Studio 60 (hablaremos de ella en este blog más adelante) y no duró más de dos temporadas. Y parece que Mr. Sunshine va por el mismo camino.
En primer lugar decir que todo lo que haga Mathew Perry es esperado con ansiedad por mi persona. Un actor genial para la comedia. Pero parece que su última creación (cocreador y guionista) no tiene lo que hay que tener para mantenerse en la parrilla americana.
El argumento fluye desde Ben Donovan (Perry) gerente encargado del funcionamiento de un estadio donde se celebran diariamente diversas actividades: futbol, hockey, circos… La vida laboral-personal de Ben se transforma en el guión de este show. Junto a él podemos encontrar a su jefa Crystal Cohen (Allyson Janey) excéntrica y obsesiva por naturaleza, que complica el trabajo de Ben de sobremanera. También encontramos a Roman Cohen (Nate Torrence) hijo de Crystal, patoso y desaliñado, que se convertirá en el aliado de nuesto protagonista. Por otro lado encontramos a Alice y Alonzo (Andrea Anders y James Lesure) pareja estable y compañeros de trabajo de Ben. Además Alice fue amante de nuestro protagonista.
Tras estos personajes, la trama se centra en el día a día del mantenimiento de este pabellón, que se complica gracias a los personajes que en él poblan.
Una serie difícil de evolucionar, por lo escaso de su jugo y que irremediablemente conllevará otro fracaso a mi amada Mathew Perry. Hasta entonces, disfrutemos de él.
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