La calle de los chinos

Navegando por Internet, descubrí este misterioso título, en la fabulosa página dedicada a Madrid ciudad, Madrid Me Mata. Se refería a una posible Chinatown, situada en el barrio de Tetuán. Más concretamente en la calle General Margallo. Y nos recomendaba a que cualquier aficionado a la comida china debía al menos pasar por allí para conocerlo. Y con semejantes intrigas cómo no acercarse a conocerlo.

Y tras la visita, no puedo más que recomendársela yo también a todo el mundo. Si bien es verdad que hay mucha información sobre la cantidad de comercios chinos en Carabanchel o Lavapiés, que la gente denomina como los verdaderos Chinatown de Madrid, no es menos verdad que la magia de la calle General Margallo es inigualable. Comunicada con una salida del metro de Tetuán, nos encontramos con un paraje inimaginable: 

- Tres Supermercados Chinos “Ibero-China”. Lo más curioso e increíble es que no son simples tiendas regidas por chinos, sino tiendas de productos chinos, donde los compradores son en su gran mayoría también chinos, dónde nos encontramos todas las etiquetas en chino, y es raro oír algo de español. Te trasladas al lejano país en poco tiempo, viendo una gran variedad de productos, que no pensarías encontrar. Muchísimo pescado, infusiones, alimentos con Ginseng, cervezas y vinos propios… Además de lo característico chino, la mayor cantidad de especias y salsas de mil y un tipo distinto, junto con una cantidad y variedad de pasta también asombrosa.

- También encontramos en la calle un “todoacién” chino clásico, y una tienda de accesorios chinos. En esta último los amantes de la cultura asiática disfrutarán de la gran cantidad de productos, desde estatuas de budas a palillos chinos, pasando por “wok” auténticos.

- Lo más curioso quizás del caso es que nos encontramos con una inmobiliaria china también en la misma calle. Algo que no se suele encontrar por Madrid. Es sin duda un aliciente más para llenar de exotismo la calle del General Margallo. 

Así que ya sabéis. Si vuestra ilusión es visitar un país tan exhuberante como China pero, como a la gran mayoría, le es harto imposible por el precio y la distancia, solo tienes que acercarte a General Margallo e impregnarte del aroma asiático. Una visita que sin duda merece la pena. 

Tamara Criado Gómez